Televisores OLED vs. QLED: ¿Cuál es mejor tecnología?

La tecnología de los televisores vive días de bonanza. El Ultra HD 4K está ya muy consolidado, los televisores 8K son cada vez más comunes, el HDR está ya disponible y el streaming pone a nuestro alcance una oferta casi infinita de contenidos todo el día, todos los días.

Pero también son tiempos confusos para la tecnología televisiva, con nuevas siglas y términos de marketing que llueven como confeti en la boda del director general de una empresa de confeti.

Una de las confusiones constantes radica en la comparación entre las dos tecnologías que compiten en el extremo premium del mercado de los televisores: OLED y QLED. ¿Qué son exactamente, cuál es la diferencia y cuál está en primera posición si se quiere obtener la mejor imagen posible? Permítanos informarle.

Características y diferencias entre QLED y OLED

Aún falta un tiempo para que MicroLED sea una propuesta realista para la mayoría de la gente y los puntos cuánticos autoemisivos están aún más lejos. Esos inminentes televisores QD-OLED pueden mezclar algunas de las cualidades de QLED y OLED, pero parece poco probable que resulten ser realmente lo mejor de ambos mundos.

Por lo tanto, el Santo Grial de la televisión está todavía muy lejos, y el comprador de un televisor aquí y ahora se ve obligado a elegir la combinación de puntos fuertes y compromisos que mejor se adapte a su gusto.

Los televisores QLED de Samsung ofrecen una imagen más brillante y potente que la de sus rivales OLED, y en los últimos años han cerrado la brecha en términos de profundidad de negro y ángulos de visión. Los nuevos Neo QLED con retroiluminación LED son un paso más en esa dirección.

Sin embargo, el OLED sigue teniendo una ligera ventaja en estos aspectos, y aunque los televisores OLED no son tan brillantes como los QLED, sus propiedades autoemisivas hacen que el contraste sea absolutamente impresionante.

Otra cosa que hay que tener en cuenta es que la tecnología del panel utilizado es sólo una parte del rompecabezas de la imagen, ya que el procesamiento de un aparato marca una gran diferencia en el rendimiento. Por eso los OLED de LG, Philips, Panasonic y Sony tienen un aspecto diferente en acción. Algunos son más impactantes, otros más nítidos; algunos ofrecen colores más ricos y otros manejan mejor el movimiento. En otras palabras, no puedes ir simplemente a comprar el primer OLED que veas.

Aunque prácticamente todos los QLED son vendidos por Samsung, también difieren de un modelo a otro; no tanto en términos de procesamiento, sino en términos de especificaciones clave como el brillo y el número de zonas de regulación de la luz de fondo. Para conseguir el QLED más potente y con más zonas de regulación, hay que optar por el 4K QN95A/QN94A (Reino Unido) o el QN90A (EE.UU.), o subir a un modelo 8K.

La conclusión es que tanto OLED como QLED son capaces de ofrecer resultados excepcionales, y que probablemente sea mejor no fijarse en una tecnología específica y buscar simplemente el mejor televisor que puedas permitirte.